Por : Gustavo Gómez

Un día después de haberse realizado la última competencia de casas de este año y de conocerse el puntaje final, la sensación de satisfacción y tranquilidad por los logros obtenidos es aún más grande. Un cúmulo de sentimientos entre la felicidad del triunfo y la nostalgia que generan los recuerdos, y el tener que despedirse de personas muy importantes para la casa es lo que se percibe hoy.

Es necesario dar un saludo de reconocimiento y gratitud por la labor realizada, a todos y cada uno de los profesores y alumnos, quienes a través del año se prepararon con gran constancia y dedicación, para enfrentar como ganadores todos los retos que se les impusieron: gracias a su buen trabajo, somos los mejores.

De la misma manera, le damos la bienvenida a Natalia Serrano como nueva capitana de la casa, seguramente, los valores que la llevaron a alcanzar este mérito le permitirán guiarnos por la senda del triunfo. A Natalia Fernández, no existen palabras que medianamente retribuyan el inmenso esfuerzo que hizo a favor de su casa, ella seguirá siendo un ejemplo a seguir, no sólo en nuestra casa, sino en todos los ámbitos académicos, y la huella que ha dejado perdurará por siempre en las mentes y corazones de quienes, desde ya la extrañamos… ¡…Buen viento y buena mar…!

Finalmente, deseo recrear en la mente de cada lector la imagen de una persona que durante mucho tiempo fue quien sembró y abonó de manera adecuada los frutos que hoy recogemos. Para ella también, el reconocimiento a su responsabilidad en este triunfo y que tenga seguro, que todos quienes seguimos al frente de esta bandera sabemos que el nombre de Stella Fonseca es punto de referencia en nuestros horizontes.

Profesores, alumnos, amigos, familia Quimbaya, “Ganar no es lo mas importante… es lo único…”